Cada año se diagnostican 1.9 millones de nuevos casos de diabetes en el país. Y hay en total cerca de 26 millones de personas que la sufren. Los altos niveles de azúcar en la sangre pueden ser un grave peligro para tu salud y tu vida, por eso mira algunos remedios naturales y mantén a esta condición bajo control.
¿Tomar o no tomar medicina alternativa?
Según el Centro Nacional de Medicina Complementaria y Alternativa, aún hacen falta algunas investigaciones para asegurar qué remedios son efectivos y cuáles no. Antes de tomar alguno es importante que te informes, y toma en cuenta que estos suplementos no sustituyen el tratamiento médico.
1. Nopal
Según el Dr. Alberto Frati, del Colegio Mexicano de Medicina Interna, el nopal reduciría los niveles de azúcar en la sangre, y ayudaría a mantenerlos estables: "El nopal contiene mucha fibra y otras sustancias que controlan y normalizan el metabolismo del azúcar, por lo que no debe faltar en la dieta de alguien con diabetes", puntualizó.
2. Canela
Según el nutricionista Richard Anderson, bastaría media cucharadita de canela al día para controlar el nivel de azúcar en la sangre y reducir la presión arterial en pacientes diabéticos. "Gracias a esto, la canela ayudaría a prevenir diversas complicaciones de la diabetes", asegura el Dr. Anderson.
3. Omega 3
Los ácidos grasos Omega 3 elevarían la sensibilidad a la insulida en los pacientes diabéticos, por lo que aydarían a controlar los niveles de glucosa en la sangre, explica el Dr. Andrew Odegaard, de la Universidad de Minnesota en Minneapolis. "Lo mejor es consumirlos a través de los alimentos, así se garantiza una mejor alimentación", puntualiza.
4. Ajo
En un experimento con ratones se encontró que el ajo reduciría los niveles de azúcar en la sangre en casos de diabetes tipo 1 y 2. "Esto se debe principalmente a que el ajo normaliza el metabolismo de la glucosa, y a que algunas de las sustancias que contiene tienen efectos semejantes a los de la insulina", explica el Dr. Sakurai.
5. Arándanos azules
Esta fruta ayudaría a evitar problemas en los ojos relacionados con la diabetes. "Los antioxidantes contenidos en el arándano azul protegen los vasos capilares y los nervios de los ojos de los daños que pueden ocasionarles los altos niveles de azúcar en la sangre o la hipertensión", explica un estudio publicado en el Molecular Nutrition & Food Research.
6. Té verde
Según el Dr. Hiroshi Tsuneki, de la Universidad de Toyama, en Japón, el té verde elevaría la sensibilidad a la insulina y ayudaría a evitar los problemas cardiovasculares comunes en los pacientes con diabetes. “Lo ideal para obtener sus beneficios sería tomar entre 4 y 8 tazas de té al día”, puntualiza el Dr. Tsuneki.
7. Alholva (fenugreek o heno griego)
Según la Dra. Laura Shane-McWhorter, de la Universidad de Utah, las semillas de alholva son de gran utilidad en el control de la diabetes: "consumir entre 100 y 150 gramos de estas semillas cada día reduciría en casi 30% los niveles de glucosa, además de ayudar a controlar el colesterol, un rasgo asociado con la diabetes", asegura.
8. Cebolla
En un estudio de la Universidad de Geriza, en Sudán, se encontró que consumir al menos 100 gramos de cebolla morada cruda cada día ayudaría a reducir los niveles de glucosa en pacientes con diabetes 1 y 2 casi tan bien como algunas drogas; esto se debería en parte a que este alimento es rico en flavonoides y azufre.
9. Magnesio
El magnesio elevaría la sensibilidad a la insulina y controlaría la presión arterial de los pacientes diabéticos, explica el Dr. Harold de Valk, del Centro Médico de la Universidad Utrecht en los Países bajos. “La diabetes se relaciona con una deficiencia de magnesio, así que los pacientes deberían consumir alimentos ricos en este mineral, como las legumbres de hoja verde”, puntualiza.
10. Ginseng
El extracto de ginseng elevaría la sensibilidad a la insulina en pacientes diabéticos: "La insulina suele ser menos efectiva en caso de diabetes, pero el ginseng ayuda a combatir esa condición provocando que los pacientes aprovechen mejor la insulina que tienen", asegura el Dr. John L. Sievenpiper de la Universidad de Toronto.
Antes de tomarlos, habla con el médico
La ADA recomienda hablar con el médico sobre los remedios o suplementos que estés tomando o que pienses tomar, y preguntarle sobre los efectos que pueden tener en tu salud y en relación con otros medicamentos. Esto ayudará a tu médico a darte una mejor atención y un tratamiento más adecuado.
11. Cromo
El Dr. Gregory Singer, de la Escuela de Medicina de Yale, asegura que tomar un suplemento de cromo ayudaría a controlar los niveles de azúcar en la sangre y a elevar la sensibilidad a la insulina en pacientes con diabetes tipo 2, sin presentar efectos secundarios significativos.
12. Melón amargo
"El melón amargo tiene un efecto parecido al del ejercicio: ayuda a los diabéticos a aprovechar la glucosa y a mantenerla en niveles estables. Aunque hay muchas drogas que hacen eso, el melón amargo no tendría efectos secundarios ni riesgos", explica el Dr. Jiming Ye, del Instituto de Materia Médica en Shanghai.
13. Wereke o guareque
Según el Dr. Francisco Cruz Sosa, de la Universidad Auntónoma Metropolitana en México, el wereke ha mostrado ser efectivo para reducir y mantener los niveles de glucosa, además de tener propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, lo que ayudaría a evitar otras complicaciones relacionadas con la condición diabética.
14. Gimnema (Gymnema sylvestris)
La gimnema o gurma es una planta de la India rica en ácido gimnémico, el cual ayuda a elevar la producción de insulina, permitiendo así tener un mejor control de los niveles de azúcar en la sangre, explica un estudio llevado a cabo por el King’s College en Londres.
15. Ácido alfa-lipoico
Éste ácido reduciría el riesgo de neuropatía diabética, provocada por el daño que sufren los nervios a causa de los niveles altos de azúcar en la sangre, explica el Dr. Alexander Ametov, de la Academia Médica de Rusia. “Esto se debe a que el alfa-lipoico es un potente antioxidante que evita el daño celular", asegura el Dr. Ametov.
¡No dejes tu tratamiento!
Según la ADA, a diferencia de las drogas prescritas, los suplementos herbales no están científicamente garantizados: pueden o no funcionar dependiendo de diversos factores. Debido a esto es importante NO abandonar el tratamiento convencional. Y cualquier cambio que sientas (bueno o malo) coméntalo con tu médico.